Esta plaza es mágica a cualquier hora del día o de la noche. Sin duda, una de las plazas de mayor belleza de España y del mundo, además de uno de los monumentos barrocos más importantes de la península.
Declarada Monumento Nacional desde 1935, en la justificación técnica y artística se afirma que es "la plaza más decorada, proporcionada y armónica de todas las de su época existentes en España". Tiene 88 arcos y numerosos medallones labrados.
Todavía hoy se celebran los principales eventos de la cuidad, de todo tipo, lo mismo que ha sido en todas las épocas: corridas de toros, procesiones e incluso ajusticiamientos llegaron a acontecer en la Plaza Mayor. Por ello algunos dueños de las viviendas alquilaban sus balcones a los espectadores a un precio bastante elevado.